domingo, 14 de febrero de 2010

Entre una y dos no me peino

Tampoco lo hago las otras veintitrés horas restantes. Reafirmo que mi peinado combina a la perfección con mi bermuda plomo y mi colgante artesanal. No me peino para ir al trabajo, no me peino para hacer juego con mi polera negra y tampoco lo hago para salir con alguien; simplemente procuro que asiente con mi colgante artesanal y con mi bermuda plomo.
Ordeno mi pelo entre una y dos para esperar que sean las tres e irme a dormir. Buenas noches.


1 comentario:

Yirsián dijo...

Me gustó este textooo :)
Chocha me siento un poco jajaja

Hablamos luego.